El derecho a la protección de datos personales está profundamente conectado con el concepto de tratamiento de datos. El artículo16, 2, del TFUE encomienda al legislador europeo que establezca las normas sobre protección de las personas físicas respecto del tratamiento de datos de carácter personal y las normas relativas a la libre circulación de dichos datos. Y efectivamente los principios que regulan el funcionamiento del RGPD hagan referencia al tratamiento de los datos. En tal sentido todo tratamiento de datos personales ha de ser “lícito” (art.6), de modo que debe estar claro que se están recogiendo, utilizando, consultando o tratando de otra manera datos personales que conciernen el interesado, así como la medida en que dichos datos son o serán tratados. Es el tratamiento de los datos se tienen que respectar todos los principios del articulo 5 RGPD, como licitud, lealtad y transparencia; limitación de la finalidad; minimización de datos; limitación del plazo de conservación. La limitación del articulo 22 hace referencia al tratamiento automatizado, y está claramente conectada con el “mundo” de la IA.
Es un concepto con una relevancia central desde la óptica de la IA puesto que muchas aplicaciones de la IA se basan en el tratamiento de datos personales